Deprimente es
que llenes tu boca con frases de olvido, pero que esa no sea tu
intención.
Monótono es
vivir viendo tus lágrimas caer.
Triste es
que sigas molestando en el camino tal como una piedra,
cuando bien podrías vivir tu propia travesía.
Lamentable es
tu lamentación, tu odio y tu amor artificial.
Amor es
alegría, odio, enojos y carcajadas.
Obsesión sos vos.