Guardaré un espacio
para quienes realmente quieran quedarse, para las experiencias nuevas que están
por venir, para las sorpresas que entran sin avisar, para las miradas que me faltan conocer, para los sabores
que tengo que probar, para la música que me acompaña, para palabras
verdaderas, para todo lo que me enseñe algo nuevo, para las risas que me hacen
sentir viva, para los abrazos que me llenan, para la tierra que me falta pisar,
para las locuras por realizar y para el amor que tengo que cuidar. También quitaré
todo lo que tenga que quitar, para que ese lugar sea ocupado por las cosas que
están esperando llegar.