No te esperaba, apareciste de la
nada. Te estaba olvidando, por fin era feliz.
¿No lo podés
evitar, no? Venís cuando menos lo espero y te vas cuando mas te quiero. Jugás,
como si fuera un juguete. Que no te importo está de más aclararlo, pero mi
mente se vacía, se libera de ideas al momento en que tu figura penetra en mis
ojos. Me olvido de todo, no pienso y vuelvo a caer en tu juego.